Las relaciones con China constituyen una oportunidad para el comercio de la República Dominicana

SANTO DOMINGO, 30 de julio de 2018.- El economista Eduardo Klinger expresó que el empresariado dominicano abrió la puerta de las intensas relaciones comerciales desarrolladas con China y corresponde al Gobierno crear un marco jurídico y práctico que las incentive y las proteja. Precisó que en 2017 el intercambio entre los dos países alcanzó US$2,603 millones correspondiendo a la República Dominicana solo 145 de exportaciones, que se tradujeron en un déficit para el país de US$2,458 millones. Klinger expuso junto al experto en política internacional, Iván Ernesto Gatón, en el conversatorio “Relaciones China-República Dominicana: aspectos económicos, históricos y culturales”, organizado por Centro de Estudios de Economía de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode), el lunes 30 de julio. David Pimentel, miembro de la iniciativa, ofreció las palabras de bienvenida a la actividad. “No es un consuelo el hecho de que es la mitad del déficit con EE.UU. sino un indicador de que el país tiene mucho que hacer en términos de incrementar su oferta exportable y, además, agregarle valor a los rublos agropecuarios que tienen espacio en el mercado internacional”, manifestó Klinger en su abordaje sobre la balanza comercial entre la República Dominicana y China. Recordó que América Latina y el Caribe tuvieron un déficit en el comercio global con China, pero el pasado año el balance de exportaciones – importaciones de alimentos favoreció a esta región por US$26 mil millones. El economista enfatizó que China alberga una enorme población en un país territorialmente gigantesco, pero con tierras poco productivas. Por tanto, necesitan alimentos. Además, refirió a que dada la disposición y capacidad china para invertir, “pudiera canalizarse una parte a industrializar varios de nuestros productos agropecuarios de manera de incrementar el valor de nuestras exportaciones y mientras aumentamos nuestro aporte al intercambio comercial con China nos reposicionamos como mercado alimenticio del Caribe”. Recomendó tomar en cuenta el estudio de factibilidad para un acuerdo de libre comercio con China y advirtió: Para los que viven de susto en susto y en todo ven un peligro, me permito señalarles que Costa Rica tiene desde hace más de cinco años uno vigente – y sigue participando del DR CAFTA sin haber sufrido ningún terremoto geopolítico – y Panamá ya empezó a acercarse. Los chinos gustan de acuerdos de libre comercio”. Destacó que se piensa en inversiones en infraestructura y sí, ciertamente, es un sector en el que los chinos invierten mucho. “Siempre se piensa en el puerto de Manzanillo. Es correcto, se trata del mejor puerto natural del país y se encuentra en la costa norte. Sin embargo, sería estratégicamente relevante verlo como parte de la aspiración de convertirnos en el hub comercial de la región, creando un esquema logístico de acopio y distribución de carga de exportaciones e importaciones de las islas del Caribe con un tren que conecte los puertos de la costa sur con Manzanillo y al revés”, sugirió. Indicó que los chinos invierten mucho en ferrocarriles, y ya lo están haciendo en Costa Rica y Panamá. Para la…

SANTO DOMINGO, 30 de julio de 2018.- El economista Eduardo Klinger expresó que el empresariado dominicano abrió la puerta de las intensas relaciones comerciales desarrolladas con China y corresponde al Gobierno crear un marco jurídico y práctico que las incentive y las proteja.

Precisó que en 2017 el intercambio entre los dos países alcanzó US$2,603 millones correspondiendo a la República Dominicana solo 145 de exportaciones, que se tradujeron en un déficit para el país de US$2,458 millones.

Klinger expuso junto al experto en política internacional, Iván Ernesto Gatón, en el conversatorio “Relaciones China-República Dominicana: aspectos económicos, históricos y culturales”, organizado por Centro de Estudios de Economía de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode), el lunes 30 de julio. David Pimentel, miembro de la iniciativa, ofreció las palabras de bienvenida a la actividad.

“No es un consuelo el hecho de que es la mitad del déficit con EE.UU. sino un indicador de que el país tiene mucho que hacer en términos de incrementar su oferta exportable y, además, agregarle valor a los rublos agropecuarios que tienen espacio en el mercado internacional”, manifestó Klinger en su abordaje sobre la balanza comercial entre la República Dominicana y China.

Recordó que América Latina y el Caribe tuvieron un déficit en el comercio global con China, pero el pasado año el balance de exportaciones – importaciones de alimentos favoreció a esta región por US$26 mil millones.

El economista enfatizó que China alberga una enorme población en un país territorialmente gigantesco, pero con tierras poco productivas. Por tanto, necesitan alimentos.

Además, refirió a que dada la disposición y capacidad china para invertir, “pudiera canalizarse una parte a industrializar varios de nuestros productos agropecuarios de manera de incrementar el valor de nuestras exportaciones y mientras aumentamos nuestro aporte al intercambio comercial con China nos reposicionamos como mercado alimenticio del Caribe”.

Recomendó tomar en cuenta el estudio de factibilidad para un acuerdo de libre comercio con China y advirtió: Para los que viven de susto en susto y en todo ven un peligro, me permito señalarles que Costa Rica tiene desde hace más de cinco años uno vigente – y sigue participando del DR CAFTA sin haber sufrido ningún terremoto geopolítico – y Panamá ya empezó a acercarse. Los chinos gustan de acuerdos de libre comercio”.

Destacó que se piensa en inversiones en infraestructura y sí, ciertamente, es un sector en el que los chinos invierten mucho. “Siempre se piensa en el puerto de Manzanillo. Es correcto, se trata del mejor puerto natural del país y se encuentra en la costa norte. Sin embargo, sería estratégicamente relevante verlo como parte de la aspiración de convertirnos en el hub comercial de la región, creando un esquema logístico de acopio y distribución de carga de exportaciones e importaciones de las islas del Caribe con un tren que conecte los puertos de la costa sur con Manzanillo y al revés”, sugirió.

Indicó que los chinos invierten mucho en ferrocarriles, y ya lo están haciendo en Costa Rica y Panamá. Para la República Dominicana, en su opinión, se abre gran potencial para las zonas francas por las cercanías a la costa este estadounidense, el sur de Europa y el noroeste de África.

Igualmente, Klinger se refirió a China como el principal emisor de turistas en el mundo, con más de 130 millones de ciudadanos viajando. Y puntualizó que ya le concedieron a Panamá la calificación de “Destino Turístico Aprobado”, lo cual le da paso a la promoción turística, con resultados verificables, como la inauguración de dos vuelos semanales de Air China.

“En 2018 los panameños esperan 40 mil turistas y para 2019 unos 200 mil”, destacó, para agregar que la realidad es impresionante y deja sin argumentos a los pesimistas profesionales abriendo un gran desafío al Gobierno y al empresariado dominicano.

Gatón explica los avances de China
El experto en política internacional estimó que el progreso económico y social de la República Popular China se debe a que tiene una visión colectiva hacia un destino común, en contraposición de los políticos de occidente, que se han orientado hacia el individualismo.

Haciendo una retrospectiva, Gatón recordó que China conforma una de las civilizaciones más antiguas del mundo con continuidad hasta la actualidad, con sus orígenes en la cuenca del río Amarillo, donde surgieron las primeras dinastías Xia, Shang y Zhou.

“La existencia de documentos escritos hace cerca de 3500 años ha permitido el desarrollo en China de una tradición historiográfica muy precisa, que ofrece una narración continua desde las primeras dinastías hasta la edad contemporánea”, manifestó.

Y agregó que la cultura china, según el mito, se inaugura con los tres emperadores originarios: Fuxi, Shennong y finalmente el Emperador Amarillo Huang, este último considerado como el verdadero creador de la cultura.

Dijo que sin embargo, no existen registros históricos que demuestren la existencia real de estas personalidades, las que, de acuerdo con la transmisión oral de generación en generación, habrían vivido hace unos 5000 a 6000 años.

Gatón continúo enumerando las diversas dinastías que han gobernado en China por miles de años, “lo que evidencia que la civilización viva más antigua del orbe, es la China”. “Esta sucesión ininterrumpida de dinastías, son la muestra inocultable de un pasado que unido al presente, muestra que el reino medio no ha sucumbido ante el inexorable paso del tiempo, y los avatares de las disputas de los imperios que, como fue su caso, sufrieron la llegada de la colonización europea y japonesa”, citó al detallar todos los episodios por los cuales ha luchado China.

Aseguró que los chinos consolidaron el imperio instaurando un sistema de funcionarios públicos para dirigir los asuntos del Gobierno, y que la meritocracia exige pasar la difícil criba del examen estatal conocido como “Guokao”.

“Hoy, occidente, luego de haber iniciado su era de conquistas, haber tenido la hegemonía del planeta, desde hace 5 siglos, asiste absorto a la emergencia china como actor preponderante del escenario global”, señaló Gatón.

El experto en política internacional consideró, finalmente, que “los chinos a pesar de los pesares, y en contraposición con occidente, donde se ha ampliado la brecha entre ricos y pobres, han podido sacar de la pobreza a más de 800 millones de personas y crear una clase media, en aumento, de más de 300 millones de individuos”.

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